Día 2
Que no se os peguen las sábanas, hay que coger fuerzas en el desayuno que tenemos un gran día por delante.
A las 10.30h un autobús nos recogerá para dirigirnos al puerto de Santa Pola, desde donde tiene salida nuestros «taxis» acuáticos para desplazarnos hasta la increíble Isla de Tabarca.
«En el pasado, Tabarca fue refugio de Piratas berberiscos. En el siglo XVIII, Carlos III ordenó fortificarla y levantar en ella un pueblo en el que alojar a varias familias de pescadores que estaban cautivos en la ciudad tunecina de Tabarka. Las murallas que rodean su núcleo urbano han sido declaradas Conjunto Histórico Artístico y Bien de Interés Cultural.
A la llegada a la isla podremos disfrutar de calas y playas de aguas transparentes y de un pintoresco puerto marinero. Además de pasear por su núcleo urbano.
SNORKEL: Para todos los amantes del snorkel o primeros aficionados, recomendamos llevar aletas, gafas y tubo de bucear, ya que Tabarca es el ecosistema más singular de todo el Mediterráneo; posee verdes praderas bajo el mar de Posidonia, el pulmón mediterráneo. En fondos de poca profundidad habitan muchas especies de animales, declarada Reserva Marina dada la excepcional concentración y riqueza de vida que alberga.
A mediodía comida picnic en la playa. Pero si eres un amante del buen pescado, recomendamos visitar alguno de sus restaurantes y deleitar el paladar con el espectacular caldero tabarquino, un exquisito plato típico de la isla.
Durante la tarde seguiremos disfrutando de la playa y el gran ambiente que tiene la isla en verano.
Regresamos al hotel y nos damos un chapuzón en la piscina, mientras los niños disfrutan en el agua, los adultos podemos saborear unas cervezas en el chiringuito piscinero!
Cena de grupo y noche de juego en familia. Es momento de unas buenas risas, dividiremos a todo el grupo en dos equipos y… A JUGAR! Preguntas, retos, pruebas, que deberéis superar en grupo para conseguir la victoria de tu equipo.
Y si todavía tienes ganas de más, volvemos al chiringuito de la playa para disfrutar de las noches veraniegas.